lunes, 27 de febrero de 2017

ESCRIBE TU EPOPEYA

                          Canta, ¡oh musa!, la travesía que le acometen a estos versos.
Igual que la que arreciaron las olas contra el ya carcomido barco de Ulises
y de los numerosos desolados Oráculos donde se provinieron batallas victoriosas
y batallas que destruyeron grandes imperios.

Cántame pues, si cuando cierro los ojos y atisbo esas ruinas
de aquellos brazos extendidos de mármol blanco bautizados como “Los Propileos”,
Mnesciles no trataba más que  darnos la bienvenida
a la efímera pero grandiosa  participación en la historia.
Puesto que el antes portón erigido para acceder a la ciudad gloriosa,
ahora es el buen recuerdo de una Grecia empobrecida.

¡Oh almas valerosas, que descendidas al tártaro por culpa de emperadores injustos,
aun arden en sus pechos fuegos bizantinos capaces de contrarrestar a
Hades, Cancerbero y las deudas de Coronte!
¡Qué cuando resurjan entre los mortales, les hagan cargar el techado del templo Erecteion!
¡Qué contemplen envidiosos desde  arriba en la Acrópolis, el jubiloso gozo de los
corazones puros que liberados de ambiciones, prosperan la sociedad!
¡Y antes de alzaros, recordad que en el templo de Atenea Nike,
la diosa aguarda sin alas designando vuestro inminente triunfo!

Canta, ¡oh musa!, la travesía que le acometen a estos versos.
            Que cuando yo muera mis  injusticias sean leídas como una epopeya
                                               e inspire a escribir la suya. 

1 comentario:

  1. e-popeye e-el mariiiinoooooo soooooyyyyyyy (tu-tu)

    Chiste de vieja al canto ;)

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